En una escueta resolución, el Tibunal de Disciplina de la Conmebol decidió no hacer lugar al reclamo de Boca para que le den el partido por ganado y confirmó que el partido decisivo se deberá disputar.
"El partido se va a jugar con las dos parcialidades y el 9 de diciembre", aseguró en conferencia de prensa Alejandro Domínguez, presidente de Conmebol.
Y confirmó: "Esta es una situación excepcional, tuvimos en buscar neutralidad y la ciudad de Madrid alberga todas las necesidades", agregó el titular del organismo sudamericano.
Asimismo, el organismo que rige el fútbol sudamericano definió que River deberá jugar dos partidos sin público y abonar una multa de 400 mil dólares.
El escueto comunicado publicado por el máximo ente del fútbol sudamericano se limitó simplemente a informar que no hacía lugar al pedido del club de la ribera y a ordernar al Departamento de Competiciones de Clubes a reprogramar la final, cuya sede será el Santiago Bernabéu.
De esta manera y luego de otra serie de idas y vueltas que tuvieron que ver con la sede para jugar el partido, teniendo en cuenta que la Conmebol decidió que el partido se jugaría fuera de Argentina, el Santiago Bernabéu de Madrid terminó siendo el estadio elegido, dejando atrás Doha, Asunción, Medellín, Miami y muchas otras ciudades que se mencionaron como posibilidad. El partido se jugará el domingo 9 a las 20.30.
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