Sin embargo, tras los cambios en la meta inflacionaria para 2018 que estableció el Gobierno, del orden del 15%, Schiaretti tuvo que establecer una cláusula gatillo. “En Córdoba los aumentos van a ser con cláusula gatillo para que los empleados públicos no pierdan poder adquisitivo en relación a la inflación, que es lo razonable”, expresó el gobernador cordobes.
En la Rosada pretenden que el modelo de paritaria 2018 sea el que firmó sindicato de empleados municipales de Neuquén, con un aumento del 16% en tres cuotas y sin cláusula gatillo. Aunque Marcos Peña planteó la necesidad de "respetar" la meta de inflación del 15%, aunque la CGT ya le avisó que es "una fantasía".
La aplicación de la cláusula gatillo le permitió a los empleados públicos cordobeses llegar a un aumento salarial del 27% en 2017 (la inflación oficial en Córdoba marcó un 25,5% el año pasado), ocho puntos más de lo que habían firmado.
Schiaretti no sólo marcó distancia en el tema de la cláusula. También lo hizo en otro tema clave para la Rosada como el recorte de cargos para achicar el déficit fiscal, que como explicó LPO en Nación tendrá eje en las jubilaciones anticipadas.
El cordobés ya avisó que no seguirá esos pasos. "Poner en marcha jubilaciones anticipadas lo único que haría sería aumentar el déficit de la Caja de Jubilaciones", sostuvo Schiaretti.
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