La caída en ventas se debe "al exponencial aumento de entrada de productos de consumo masivo a la localidad, provenientes de compras de residentes argentinos y de turistas, en el país vecino de Chile", detalla la Cámara, citada en una investigación por Mauro Federico de Ámbito Financiero.
"Está provocando bajos niveles de facturación, atrasos en las cadenas de pagos y su posible consecuencia en la afectación del empleo", detalla el director Ejecutivo del nucleamiento empresarial, Claudio Cabaleiro. "Todo esto se explica sencillamente: hay productos en comercios, shoppings y supermercados que hoy se pagan en Chile hasta un 60% más baratos que en la Argentina, y eso no es responsabilidad de nuestros hermanos trasandinos", considera Cabaleiro.
El Servicio Nacional de Turismo de Chile (Sernatur) estima que 3,7 millones de turistas argentinos cruzarán este año la Cordillera, un promedio de 10.000 por día.
Los números del gasto con tarjetas de crédito y débito en 2016 se duplicaron con respecto a 2015, según la base de datos de Transbank, la administradora de Visa, Mastercard y Diners Club en Chile.
Sumado a esto, a través de diversos impuestos, municipio, provincia y nación se apoderan del 137,4% de las ganancias de los comercios. "Acá nos matan con los impuestos, no se puede competir si prácticamente la mitad de lo que facturamos, se lo lleva el Estado", lo resume uno de los comerciantes que debió cerrar sus puertas este año.
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