Tras la renuncia de Luis Caputo y la asunción de Guido Sandleris al frente la máxima autoridad monetaria, el mercado volvió a mostrarse hostil para el Gobierno. La fuerte sangría de reservas internacionales fue acompañado por el ascenso del riesgo país.
El indicador medido por el banco JP Morgan subió 29 unidades a 623 puntos, por lo que volvió a estacionarse por encima de la barrera de los 600.
El anuncio de la implementación de la flotación cambiaria entre bandas sin intervención también afectó una de las variables que más preocupa el Gobierno: el dólar alcanzó un nuevo récord histórico y cotizó a $ 41,88.
No hay comentarios.