Según el economista, para aprobar el préstamo el Fondo Monetario mirará las cuentas fiscales, la acumulación de reservas y la trayectoria de la inflación, pero también estará atento a preocupaciones sociales y tomará en consideración los aspectos políticos de la Argentina.
Kiguel dijo que con el financiamiento del FMI la Argentina puede estar fuera de los mercados este año, 2019 y probablemente 2020, por lo que "desaparecen los fantasmas de que el país no podrá pagar la deuda".
Al hablar ante empresarios en el 35º Congreso Anual del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF), Kiguel pronosticó que si sale el acuerdo bajará el riesgo país a "niveles razonables" y se escalará en los ratings crediticios desde la posición actual (B+) hacia escalones más cercanos al "nivel de inversión".
No obstante, el director de la consultora Econviews advirtió que será "muy importante el tamaño del paquete" crediticio que otorgue el Fondo. "Este es uno de los riesgos para la Argentina: si el paquete es chico, de algo así como 22.000 millones de dólares, que es un (acuerdo de) stand by normal, el mercado se va a decepcionar y vamos a tener otro sacudón", dijo.
El economista consideró que para que el acuerdo con el FMI "funcione bien" tiene que ser un "préstamo más grande" y citó el caso de Hungría, que recibió un crédito equivalente a diez veces su cuota en el Fondo.
Si el Gobierno de Mauricio Macri accede a diez veces la cuota en el FMI, la Argentina recibiría una inyección de 45.000 millones de dólares. "No creo que nos den eso. Pero el número tiene que estar alrededor de los 30.000 millones, que es el que se filtró al principio de todo. Ese número sería bueno para calmar a los mercados", analizó Kiguel.
Si ese dinero llega al país, dijo el analista, la economía de la Argentina podría salir "fortalecida" porque las cuentas fiscales van a estar "mejor" y habrá un "programa monetario realista que va a bajar la inflación".
No hay comentarios.