"Haremos más venganza. Estaremos en Roma, inshallah (si Dios/Alá quiere)", fue el mensaje de uno de los yihadistas, antes de apuntar con su fusil a una fotografía del Papa. También se ve a algunos de sus compañeros romper otra imagen de Francisco.
Luego, una voz en off manifiesta que "después de todos sus esfuerzos, la que puede quebrarse sería la religión de la cruz" y que "la enemistad de los cruzados hacia los musulmanes sólo sirvió para envalentonar a una generación de jóvenes".
En el video, difundido por Al-Hayat Media Center -una de las redes oficiales de EI-, también se puede observar a varios extremistas en la catedral filipina destruir iconografía católica, como estatuas de cristos, santos y vírgenes. También exhiben soldados del ejercito filipino acribillados.
Si bien el material audiovisual fue publicado en junio, hace cinco días se conocieron nuevos fragmentos, dentro de los cuales aparece la amenaza contra Francisco y Roma. Las imágenes fueron grabadas por el grupo fundamentalista Maute, una facción del EI en Mindanao (Filipinas), donde la mayoría de la población es musulmana.
El mensaje del Papa
Francisco no ha respondido de forma directa a las amenazas del grupo extremista, pero sí habló de la esperanza cristiana que lleva "a creer con firmeza que la muerte y el odio no tienen la última palabra sobre la vida humana" y aseguró "que al final, el mal será eliminado cómo la cizaña del campo".
"Siempre habrá problemas, siempre habrá chismes, guerras, enfermedades, pero el grano crece y al final el mal será eliminado", expresó en su catequesis de esta semana.
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