El último informe del Centro de Economía Política Argentina sobre evolución del precio de los medicamentos más consumidos por los adultos mayores es alarmante, porque revela hasta qué punto el gobierno de Cambiemos abandonó la salud de nuestros viejos a los caprichos y decisiones del Dios mercado.
El documento traza una comparación de los valores de esos remedios entre diciembre de 2015 y mayo de este año que arroja un a inflación acumulada del 98,9 por ciento, siempre sobre la base de los precios entre ambas puntas de la medición.
El desglose muestra que hay medicinas, muchas de ellas de consumo regular y masivo entre adultos mayores de 65 años que aumentaron sus precios entre un 50 y un 236 por ciento.
Algunos de los remedios que más aumentaron sus precios son el Atenolol para la hipertensión un 236 por ciento, la Furasemida, diurético para afecciones cardiovasculares el 148 por ciento, la Amlodipina, otro hipertensivo el 98 por ciento, la Fluticasona y el Seretide para enfermedades bronquiales y pulmonares el 141 por ciento, entre muchos otros.
El informe advierte que un alto porcentaje de defunciones entre los adultos mayores se da por las afecciones para las que están indicados estos medicamentos, por lo que la imposibilidad de adquirirlos puede ocasionar el agravamiento de las enfermedades que padecen elevando así el riesgo de muerte.
Este cuadro gravísimo se suma a la nueva política de Cambiemos en el PAMI, que recorta sus prestaciones y disminuye la cobertura de medicamentos y aplica nuevas dificultades para acceder a los beneficios históricos de la institución con sus afiliados.
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