Luego de una declaración indagatoria vía Skype donde se negó a responder las preguntas de los abogados fue efectivamente procesado sin prisión preventiva por el episodio violento ocurrido en 2013.
Recordemos el episodio que tuvo lugar en 2013, en la última visita de Bieber a la Argentina, que terminó en escándalo.
El revuelo fue en el boliche Ink, en Palermo. Ahí, Bieber habría instigado a su equipo de seguridad a sacarles los celulares a personas que lo habían filmado y a volver a entrar a la disco. Ahí los empleados de Justin habrían roto equipos de cámaras de seguridad.
Además, se acusa al personal del músico de haber golpeado a un fotógrafo que buscaba retratar a la estrella.
Esto se suma a dos inconvenientes más que tuvo el cantante con respecto al pueblo argentino. Recordemos el episodio tan escandaloso en el que barrió el suelo con la bandera de Argentina. Al que se le suma ademas en marzo de 2016, Bieber tuvo una reacción que indignó a muchos. En la puerta de un estacionamiento en Nueva York, abrió la ventana de su camioneta y saludó a sus fans. Una de ellas le alcanzó la bandera argentina; él la vio y la dejó caer al piso despectivamente con un gesto de cinismo y despreocupación. Luego cerró la ventanilla y se fue, mientras su público le gritaba.
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