Así lo declaró Luciana Micaela Martínez, en la segunda jornada del juicio por la muerte de Pamela, horas después en La Banda.
La testigo relató que vio una camioneta "oscura y de atrás", en la parada de Garibaldi y Sarmiento.
Al contemplar la fotografía de la 4 x 4 de Salto, dijo que era casi la misma.
Vale recordar que al ampliar la indagatoria, Salto declaró que antes tuvo dos encuentros sexuales con Pamela Moreno.
"Derecho de piso"
También Luciana recordó que enfurecía a Pamela "tener que pagarle por la parada a Sheila"; en alusión a una travesti que pasaba sólo a cobrar "el derecho de piso", afirmó.
Consultada cómo era la mecánica de trabajo, Lucina relató: "Antes de subir a un vehículo, nos confiamos dónde vamos a estar; yo suelo dirigirme al hotel más cercano", subrayó.
"Hay otras chicas que optan por hoteles lejanos; priorizando espacio y comodidad", profundizó.
Maestro y mecánico
Después, otro testigo que prestó testimonio fue el maestro Gustavo Rubén Gerez, quien adquirió los neumáticos de la camioneta de Salto por $ 1.500.
La audiencia incluyó al vecino Antonio Alomo, testigo del secuestro del celular, y Ana María Cejas, vecina del Bº Lourdes, a quien la policía pidió atestiguar cuando fue detenido Salto, en su domicilio.
Al desandar el "raid" del ex policía, después de la muerte de la travesti, el tribunal también recibió el relato del mecánico Juan Alberto García (h).
Manifestó que Salto le dio las ruedas en pago de una deuda y el celular, ignorando su naturaleza.
A su vez, él se lo pasó a su mujer y ella, luego, a una adolescente de 15 años.
Cámara Gesell
Al llegar el turno de la menor, los jueces dispusieron una Cámara Gesell, por sugerencia de la defensa.
Ante psicólogos y otros profesionales, la jovencita manifestó que activó el aparato y se encontró con dos fotografías.
Al instante, reconoció que se trataba de Pamela, a quien conocía por el hecho policial y la publicación en medios de comunicación.
En horas, la policía se presentó en su domicilio y cual efecto dominó, también en la casa de Salto y se lo llevó detenido.
Sobrevino una serie de allanamientos y el secuestro de las ruedas de la 4 x 4 desmantelada de Salto.
Al promediar las 19, Salto fue conducido a la Alcaidía de La Banda.
Cerca de las 21, confesó que había atropellado y muerto a la travesti, después de apoderarse de su monedero con $ 300.
Ahora, la Justicia investiga su conducta y la Fiscalía apuesta todo a una condena a prisión perpetua.
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