Según los documentos a los que tuvo acceso El Destape, las maniobras tuvieron al propio ministro de Turismo y Cultura de Jujuy, Federico Posadas, como principal protagonista: él estuvo copiado en todos los mails y hasta participó en el armado de las licitaciones falsas.
En los correos electrónicos publicados en este artículo, se puede observar cómo se diagramó todo para que Reale-Dalla Torre lograra hacerse de casi 5 millones de pesos en concepto de comunicación social para el ministerio: desde el mes de febrero, un empleado de Posadas les envió a los directores de la firma RDT Consultores todo el contenido especificado, y hasta les pidió que aportaran "cuatro o cinco empresas que participen de la licitación privada", con la condición que "hagan actividades parecidas" y les pidió que ofrezcan "un monto más elevado", para que así sea RDT la adjudicataria.
En otro de los mails, con fecha del 8 de marzo, se menciona que el propio ministro de Morales "les entregará el pliego y las invitaciones para las otras empresas", y les pide que la fecha de recepción sea del 1 de marzo, es decir, una semana antes de la verdadera entrega, para simular los tiempos.
Como si esto fuera poco, aun sin haberse realizado la falsa licitación, desde la casilla del propio ministerio de Turismo le confirmaron a RDT que ya tenían listo el primero de los pagos: "Quédense tranquilos que ya se pidió autorización y la plata está disponible para el pago, no se olviden de enviarme la factura", detalló el empleado del ministerio, Diego Zurueta.
Quien participa activamente de la "negociación" falsa es Diego Blanco, director de RDT Consultores y uno de los nexos entre la firma y el ministerio de Turismo. Sin embargo, la firma que finalmente se adjudicó al menos el primero de los contratos no fue ella, sino La Usina Digital, donde Blanco no figura siquiera como empleado. Uno de sus dueños es en realidad Adrián Dalla Torre, uno de los socios de la primera firma en cuestión.
Esas mismas firmas fueron denunciadas en 2015 acusadas de ser "bolseras" que recibían pauta publicitaria del Gobierno de la Ciudad que comandaba el hoy presidente Mauricio Macri, cuando cientos de radios comunitarias comenzaron a denunciar que figuraba en los registros oficiales montos que nunca recibieron y que, en teoría, se quedaban estas intermediarias.
Por su parte, La Usina Digital también contaba con otras denuncias por sospechosas licitaciones ganadas a través del ministerio de Educación de Esteban Bullrich, tal como detalló el diario Página 12 a mediados de 2015.
Los correos electrónicos que exponen la operatoria:
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