Una de las causas es por una decisión del Gobierno, a través del Ministerio de Agroindustria, de fijar nuevos precios para pagar al productor, luego de que no se llegara a un acuerdo dentro del Instituto Nacional de la Yerba Mate. Esto se decidió en abril.
Ese bajo precio pagado a los productores por el kilo de hoja verde y las condiciones climáticas desfavorables, generaron que la cosecha de yerba mate se desplomara en los primeros cinco meses del año.
Así se registró una caída de 20% en el período enero-mayo de este año, respecto al mismo período del año anterior. En total, se cosecharon unos 260,4 millones de kilogramos, contra 326,4 millones del 2016 (los datos corresponden a declaraciones juradas presentadas por los operadores ante el Instituto), según publicó El Cronista.
"La caída en la cosecha reflejó la realidad que atravesaron los productores a lo largo del año, que llevaron adelante protestas y cortes de ruta en reclamo por el precio pagado por la industria, y que terminaron afectando la zafra", describe ese matutino.
No hay comentarios.