Jackie Chan llegó a la ceremonia de los Oscar acompañado de dos ositos de peluche y desconcertó a muchos.
Muy sonriente, posó para las cámaras y los alzó dejando en claro que había algo importante detrás de su comportamiento.
El actor siempre hace reír a todos en la alfombra roja y esta vez no fue la excepción. Causó ternura con los juguetes y también mucha curiosidad.
Lo cierto es que desde hace varios años, Jackie es embajador de los animales de esta especie que, hasta fines de 2016, estaban en peligro de extinción.
Pero hay más. Los juguetes también llevaban el cartel de Unicef, un programa de la Organización de las Naciones Unidas que provee ayuda humanitaria y de desarrollo a niños y madres en distintos países.
Su costado más humanitario dijo presente en la entrega de los Oscar y la recompensa no faltó. Fue reconocido con el Oscar de Honor por su gran trayectoria. "He roto tantos huesos.... y por fin me lo han dado", dijo bromeando.
No hay comentarios.